Una reflexión sobre Twitter

Hace una semana un bot me avisó de que llevo dos años en Twitter. Dos años registrado porque durante muchos meses no publiqué nada. Hace un tiempo escribí un borrador de post sobre Twitter. No lo publiqué porque no me gusta quejarme en público, de eso ya se encargan otros, pero como cuelo algún gag, aquí va:

Cada día me da más pereza entrar en Twitter. No me gustan los bucles ni perder el tiempo sin escoger en qué. No me importa si está nevando en Aranjuez o si hay retenciones en la M-30, tampoco si estás entrando en una reunión o te cuesta salir de la cama. No necesito esa información porque no me interesa y porque aunque así fuera no podría procesarla, son demasiadas personas y minutos. Recuerdo el caso de un contacto en Facebook que debe tener más de 500 amigos. Pues un lunes puso “De lunes…” en el mensaje de estado. No creo que esta persona haya dedicado un segundo a pensar que el mundo no gira alrededor de él, que por un sistema de órbitas se estableció que todos los seres humanos estemos de lunes.

Con el frío ocurre algo parecido, todos tenemos frío cuando hay vientos de siberia. Podría enteneder esta manera de hacer por un ego que se descontrola. El problema es que pasa demasiado a menudo y es agotador. Y este es el caso más extremo, el de las comidas, desplazamientos y temperaturas. Luego hay otro nivel que es el de treinta twitts al día. No puedes generar tantos mensajes interesantes en un día, nadie puede.

El bucle viene a ser que alguien me da los buenos días, lo acepto, pero no le voy a responder, asumo que todos nos levantamos con el deseo de tener un buen día. Otro acaba de despertar, le cuesta salir de la cama, no es mi caso, pero casi seguro que la mitad de sus followers han madrugado más que él. Me entero de que el cercanías que viene de Pozuelo va con retraso, pero vivo en Barcelona y sólo cojo el tren cuatro veces al año para ir a la playa de Ocata.

Tres contactos tienen una reunión esta mañana, yo no, pero cuando tenga lo diré, les debe interesar tanto como a mí. Vaya, sigo a alguien que sólo ha podido comer un bocadillo, y yo degustando un cochinillo que asé durante 12 horas. A media tarde ha muerto un diseñador de moda que me suena pero no conozco, no tengo demasiado interés por la moda pero me han avisado cuatro personas. También me recuerdan que tengo que donar a Haití, pero hoy no vi nada sobre Irán. En Chile sólo tengo al hermano de una amiga, a la que pregunté en privado por el terremoto. Y el iPad es mi última prioridad en la vida.

Por supuesto, yo sólo publico enlaces de interés universal, básicamente temas y sesiones de house, salsa, rumba y reggaeton.